martes, diciembre 15, 2009

Invitando a Humala

Me preguntaba el otro día si Lula no lee encuestas o es muy torpe políticamente como pretende el nerviosito de Santa Catalina, cuando decide que el otro personaje con el que debía entrevistarse en su viaje al Perú era Ollanta Humala. ¿Será que el brasileño que acaba de desafiar a Washington con la visita a Brasilia del presidente de Irán, no sabe en realidad con quién se reúne, o es que, como se dice por ahí, Itamarati, jamás da puntada sin hilo y sabe porqué hace cada cosa?

Si quisiésemos ser más audaces, la interrogante sería si el mensaje era sólo para Humala, algo así como una palmada en el hombro, o si rebotaba hacia García, al que ya le había llamado públicamente la atención por aislarse de UNASUR y dedicarse exclusivamente a los vínculos bilaterales. Y habrá, en realidad, alguien que piense que el nombramiento del embajador Rodríguez Cuadros para la representación peruana en Bolivia, es indiferente al intento de armar puentes entre Brasil y Perú. Yo siento la tentación de apuntar que Lula le ha contestado a la idea de García, de la diplomacia de las inversiones, con la de las relaciones multidimensionales que recomiendan un mejor trato con el grupo del ALBA, y con la oposición política interna. Y que García ha tenido que ceder algunos pasos o por lo menos callar ante el atrevimiento.

Pero, si seguimos el razonamiento, lo que viene a continuación es responder si también los altos jefes militares no han medido las implicancias y peligros de reunirse con el nacionalista, en pleno debate sobre los tanques, y en convertirlo en alguien que tiene algo que decir sobre el tema del VRAE. ¿No les llama la atención? Si fuéramos una sociedad dónde, efectivamente, el proceso electoral pudiese ser ganado por cualquiera de los contendores, y no tuviésemos que leer que para algunos lo de 2006, fue su batalla de Stalingrado (que estalinista, ¿no?), contra un supuesto peligro “fascista” que debía ser conjurado con cualquier arma legítima o ilegítima, entonces podría ser de lo más natural que el comandante Humala sea consultado por sus ex camaradas de armas.

Pero todos sabemos que no es así. En el Perú el peor pecado posible es ser chavista-humalista, aunque sea de mentira, como se imputa a este diario. Y podría añadirse además que ser parte de lo peor, incluye también ser demasiado independiente respecto a la campaña de demolición del supuesto antisistema, que no es sino la forma de empujar a la gente dentro del sistema, que es donde se la comen con zapatos y todo. Pero de pronto los militares se reúnen con el apestado, lo toman en serio, y aquí no pasa nada. O algo está pasando… que no nos damos cuenta.

El propio resultado del Colegio de Abogados merece ser reflexionado. No porque Ñique sea otra vez el chavista-humalista, que era como lo acusaba el de la metralleta con rulitos, sino porque revela que en un ambiente de profesionales, ubicados mayormente en los estratos altos y medios altos de la sociedad, se ha vencido el chantaje de no votar hacia la izquierda popular, sanmarquina, que algo debe querer decir del ánimo social comenzando el año donde arrancan decisivos procesos electorales.

16.12.09
www.rwiener.blogspot.com

4 comentarios:

Julio dijo...

el vrae es tierra d enadie.. miren lo péligroso que esta

http://elcomercio.pe/impresa/notas/muere-sargento-ep-vizcatan-al-pisar-mina-senderista/20091013/354143

Anónimo dijo...

El Partido Nacionalista de Ollanta Humala tuvo que recurrir al vientre podrido de UPP como última alternativa para poder participar en las pasadas elecciones presidenciales del 2006.

Si no lo hacía, quedaba fuera de la contienda.

Alejandro Toledo, seducido por la famosa ‘palmadita’ de los caciques económicos de siempre, hizo todo a su alcance para alcahuetear y dar impulso a los representantes de la derecha: Lourdes Flores y Alan García.

Desde la ONPE chakana, jugando en pared con el JNE de apristas y fujimoristas, abiertamente se obstruyó la inscripción de los nacionalistas con siglas propias.

El operativo 'jodamos a Ollanta' obedeció a un bien elaborado plan del hampa política que es la que ahora nos gobierna.

El 'corralito' montado por la derecha y sus mayordomos dejó a los nacionalista como última alternativa inscribirse con las siglas y personería jurídica de la UPP

El acuerdo le daba a UPP derecho a pedir cupos igualitarios en la lista de candidatos, como en efecto sucedió.

El Apra negra, mañosa en estos contubernios, de antemano había infiltrado la UPP con gente de alcantarilla que después salió hacer la labor de zapa encomendada.

A través de gruesas sumas de dinero que después se puso de conocimiento de la opinión pública nacional, el Apra negra colocó en la lista de UPP a algunas de sus "joyas" más conspicuas y osadas.

El recién expulsado del congreso, Gustavo Espinoza fue uno de los 'topos' que Alan García colocó en la UPP.

Rómulo León Alegría, como si se encontrase disertando en la Biblioteca Nacional sobre un tema realmente histórico, alargando su impotencia admitió que realizó otro "faenón" en esa repugnante agrupación.

El padre de la congresista aprista Luciana León Alegría, sin inmutarse agregó que intentó postularse en las filas de UPP siguiendo "consejos" de su compadre y compinche Alan García Pérez. Pero al final, -aclaró- cambiaron los planes porque el CEN del APRA me tenía separado la "cancillería" plenipotenciaria tierra-aire en el futuro gobierno del doctor García".

Qué gandinga de UPP cuando ahora habla de "moral". Abiertamente esta gente muestra que son unos corruptos sanamabiches..!

Comino

Anónimo dijo...

El Partido Nacionalista de Ollanta Humala tuvo que recurrir al vientre podrido de UPP como última alternativa para poder participar en las pasadas elecciones presidenciales del 2006.

Si no lo hacía, quedaba fuera de la contienda.

Alejandro Toledo, seducido por la famosa ‘palmadita’ de los caciques económicos de siempre, hizo todo a su alcance para alcahuetear y dar impulso a los representantes de la derecha: Lourdes Flores y Alan García.

Desde la ONPE chakana, jugando en pared con el JNE de apristas y fujimoristas, abiertamente se obstruyó la inscripción de los nacionalistas con siglas propias.

El operativo 'jodamos a Ollanta' obedeció a un bien elaborado plan del hampa política que es la que ahora nos gobierna.

El 'corralito' montado por la derecha y sus mayordomos dejó a los nacionalista como última alternativa inscribirse con las siglas y personería jurídica de la UPP

El acuerdo le daba a UPP derecho a pedir cupos igualitarios en la lista de candidatos, como en efecto sucedió.

El Apra negra, mañosa en estos contubernios, de antemano había infiltrado la UPP con gente de alcantarilla que después salió hacer la labor de zapa encomendada.

A través de gruesas sumas de dinero que después se puso de conocimiento de la opinión pública nacional, el Apra negra colocó en la lista de UPP a algunas de sus "joyas" más conspicuas y osadas.

El recién expulsado del congreso, Gustavo Espinoza fue uno de los 'topos' que Alan García colocó en la UPP.

Rómulo León Alegría, como si se encontrase disertando en la Biblioteca Nacional sobre un tema realmente histórico, alargando su impotencia admitió que realizó otro "faenón" en esa repugnante agrupación.

El padre de la congresista aprista Luciana León Alegría, sin inmutarse agregó que intentó postularse en las filas de UPP siguiendo "consejos" de su compadre y compinche Alan García Pérez. Pero al final, -aclaró- cambiaron los planes porque el CEN del APRA me tenía separado la "cancillería" plenipotenciaria tierra-aire en el futuro gobierno del doctor García".

Qué gandinga de UPP cuando ahora habla de "moral". Abiertamente esta gente muestra que son unos corruptos sanamabiches..!

Comino

Luis Enrique Alvizuri dijo...

Señor Wiener:

1. Tal como le comentaba en un anterior post, la situación para una parte importante del empresariado peruano es sumamente preocupante de mantenerse el modelo como está.

2. Dicho modelo Neoliberal está totalmente inclinado hacia la extracción primaria (economía minera) dejando de lado a los exportadores, industriales y agrarios.

3. El reciente caso del "espía" reveló las movidas internas para restarle poder a la CONFIEP, anunciando la reacción de quienes más se han perjudicado con la crisis internacional (ADEX, la SNI y los agrarios).

4. Hoy existe un profundo silencio político empresarial que son los indicios de un reacomodo de fuerzas, donde los de la CONFIEP han recibido el golpe y deben entender que su hegemonía primario-exportadora de los últimos 20 años ha concluido.

5. De esto se deduce que aceptar a Castañeda en el poder (que carece de base política) o a Keiko (que es más del mismo modelo que hoy ha fracasado en el mundo) sería reiterar en el error. El modelo CONFIEP ya no va más y se necesita un giro. La presencia e importancia de Lula marca el rumbo de una economía que debe mirar más hacia el empresariado nacional, que es quien realmente da trabajo y mueve la economía interna.

6. Por lo tanto la opción más adecuada para ese giro sería Humala, quien de ser el candidato del antisistema sería el representante de las fuerzas emprendedoras, aminorando la tendencia primitiva del modelo anterior.

7. Sigo pensando que, si se quiere que el Perú ingrese a cinco años de un manejo más equilibrado, tendrán que desecharse las opciones de ultra derecha y optar por la única vía que posee el discurso y el respaldo (tanto de la población como de las Fuerzas Armadas) para lograr el consenso: el partido Nacionalista.

8. Sin embargo, si la derecha peruana y los grupos favorecidos por el Neoliberalismo (Romero, Brescia, Rodríguez Pastor, Benavides y el resto de la CONFIEP) insisten en permanecer en el poder la gobernabilidad del país va a ser imposible, y los cinco años que vienen serán de un caos y una violencia persistente que polarizará a la población y hará tambalear al gobierno.

9. Necesariamente entonces habrá que "lulizar" a Humala y des-satanizarlo por obra de los mismos empresarios que veían en él al anti sistema pero que, desde todo punto de vista, es ahora el camino más aconsejable.

Muchas gracias.